Conocemos una amplia gama de estrategias de marketing engañoso, cuyo propósito es lavar la imagen de marca para generar un efecto de “nimbo” ante el consumidor. Estas prácticas, que suelen terminar en -washing, responden a una creciente demanda social por marcas comprometidas con el bien común. Lo positivo es que evidencian que a los consumidores nos importa la responsabilidad social. Lo negativo, es que muchas veces no somos lo suficientemente críticos como para distinguir entre el compromiso genuino y la publicidad disfrazada.
Entre los términos más conocidos se encuentran el greenwashing, pinkwashing y bluewashing. El concepto de artisan washing es menos difundido, pero responde a una lógica similar: se trata de una estrategia mediante la cual marcas promocionan sus productos como “artesanales”, “hechos a mano” o “tradicionales”, cuando en realidad han sido fabricados industrialmente, sin ningún vínculo auténtico con la artesanía. Esta simulación de autenticidad busca seducir al consumidor, creando un valor añadido para asociar el acto de la compra con bondad y bienestar.
¿Qué es lo artesanal (y qué no lo es)?
La definición de artesanía, según significados.com, es:
“el arte y técnica de elaborar objetos o productos de forma manual, con poca o ninguna intervención de maquinaria industrial, y mediante métodos tradicionales transmitidos de generación en generación. Este tipo de trabajo suele emplear materias primas locales y herramientas simples. Las técnicas utilizadas forman parte del patrimonio cultural inmaterial de una comunidad específica, lo que otorga a cada pieza un valor simbólico y una identidad única.”
Por lo tanto, los productos fabricados en masa, mediante procesos mecanizados, no deberían presentarse como artesanales. Si no existe la intervención de un artesano, no puede hablarse de artesanía; lo que hay es, en todo caso, una estética “artesanal”. Y si bien uno no es necesariamente mejor que el otro, lo problemático es hacer pasar una pieza industrial por una que requiere la habilidad, tiempo y dedicación de una maestra artesana.
¿Por qué es una práctica perjudicial?
Los efectos del artisan washing son múltiples y significativos:
Afecta económicamente a comunidades artesanas, que no pueden competir con productos fabricados en masa disfrazados de artesanía. También se ve afectado el diseño: lo que más “se mueve” son las copias de los diseños de las marcas conocidas.
Desvaloriza el trabajo artesanal, reduciéndolo a una estética superficial, sin reconocimiento del valor real de real del conocimiento y el tiempo que se requiere para su creación. Si una pieza supuestamente artesanal tiene el coste de 6 EUR, ¿cómo va a valorar el consumidor una pieza verdaderamente artesanal que no puede costar menos de 20 EUR?
Engaña al consumidor, minando la confianza en el mercado y dificultando el acceso a productos auténticos. Si todo es artesanal, nada lo es. Algunas marcas, en lugar de colaborar con comunidades artesanas, simplemente imitan sus estilos para obtener beneficios a bajo costo, lo que hace que la economía artesanal sea cada vez menos competitiva.
Algunos ejemplos de cómo las empresas falsifican los claims artesanales?
Manolo Bakes: Esta cadena de pastelerías, conocida por sus manolitos, utilizó durante años la palabra “artesanal” en su imagen de marca. Sin embargo, una investigación reveló que sus productos son fabricados mediante procesos estandarizados, sin evidencia de producción manual. La empresa reconoció esta mala praxis, y actualmente ha eliminado referencias a lo artesanal de su comunicación.
Sabyasachi Mukherjee y H&M: La colaboración entre el diseñador indio y la marca de fast fashion generó polémica al incluir reproducciones digitales de estampados Sanganeri, una técnica tradicional. Artesanos locales denunciaron una apropiación cultural que pone en riesgo su sustento y su herencia cultural. El caso expuso cómo grandes marcas pueden explotar el valor simbólico de la artesanía sin involucrar a quienes realmente la crean.
Como identificar el washing?
Algunas señales de alerta incluyen:
Lenguaje ambiguo sin respaldo verificable: Frases como “hecho a mano” o “100% natural” sin certificaciones, pruebas ni documentación clara.
Falta de transparencia: Ausencia de información sobre la procedencia, escala de producción, personas involucradas o procesos empleados.
Producción masiva por grandes corporaciones: La naturaleza misma de la artesanía es limitada en escala. Si un producto se produce en millones de unidades, difícilmente pueda considerarse artesanal.
El artisan washing, si es que hace falta un término más, no es solo una técnica de marketing dudosa; es una forma de apropiación cultural, simbólica y económica que perjudica tanto a productores como a consumidores. Fomentar un consumo informado, exigir transparencia y valorar el trabajo artesanal auténtico son pasos esenciales hacia un mercado más justo, ético y sostenible.
Fuentes
Craftwashing by Fabindia: The Silent Threat to Authenticity in Artisanal GoodsArtículo que analiza cómo grandes marcas como Fabindia contribuyen al fenómeno del craftwashing, afectando la autenticidad y sostenibilidad del sector artesanal.handlooom.com
Reportaje de laSextaEl director ejecutivo de 'Manolo Bakes' admite que sus manolitos "artesanales" son ultracongeladosYouTube
El secreto de los manolitos: los cruasanes más vendidos de España están congeladosInvestigación sobre el caso de Manolo Bakes y el uso del término "artesanal" en su estrategia comercial.eldiario.es
Unpacking ESG and Sustainability WashingUn análisis más amplio del fenómeno del washing aplicado al discurso de sostenibilidad corporativa.ESG Matrix
Artículo publicado en:
Recuento de comentarios del artículo:
0
comentarios
En Mina Palmera, consideramos que cada joya es una obra de arte que cuenta la historia de su origen y transmite una energía especial. Cada pieza se fabrica de forma artesanal, utilizando la plata, un metal noble con una rica historia en México y a nivel mundial. Gracias a su resistencia, estas joyas tienen una larga vida y una historia por escribir.
Te ofrecemos una guía detallada de todos los materiales qué usamos en la creación de nuestras joyas.
Plata 925 y 950: el alma metálica de nuestras joyas artesanales
La plata es el material base todas nuestras creaciones. Usamos dos tipos: plata 925, la más común en joyería de calidad, y plata 950, ligeramente más pura y maleable, preferida por algunos de nuestros joyeros artesanos.
Plata 950: presente en las colecciones Luz y Sombra y Talud-tablero, cuyos autores dan protagonismo al brillo especial que transmite esta aleación.
Plata 925: utilizada en el resto de nuestras colecciones, por su excelente equilibrio entre belleza y resistencia.
Ambas aleaciones garantizan una alta durabilidad y brillo a lo largo del tiempo, ideales para quienes buscan joyas artesanales que perduren.
Piedras naturales y reconstruidas en joyería artesanal: color, simbolismo y tradición
Las piedras naturales y reconstruidas que elegimos no solo decoran, sino que conectan con tradiciones culturales, símbolos espirituales y valores ecológicos. En la colección En Peligro de Extinción, usamos:
Amatista: su tono violeta representa lo espiritual, lo profundo.
Turquesa reconstruida: versión ecológica de una piedra tradicionalmente ligada a la protección y el cielo.
Coral reconstruido: color intenso y textura marina, en formato sostenible.
La colección Mixtli luce la incrustación de lapislázuli triturado, la piedra preciosa valorada desde la antigüedad por su color y usada tanto en la joyería como en pintura e industria textil.
Latón: un dorado natural en la colección Opuntia
El latón aparece de forma muy puntual en nuestra joyería: en la colección Opuntia, usado exclusivamente para representar los “higos chumbos”.
Su tono dorado y cálido evoca el sol, la tierra, y la rusticidad elegante de los nopales. Esta elección aporta un contraste visual al protagonismo de la plata y celebra lo silvestre, lo que brota con fuerza desde el paisaje mexicano.
Howlita y obsidiana: dualidad en blanco y negro
En la colección Luz y Sombra, la narrativa visual se apoya en dos piedras con fuertes connotaciones simbólicas:
Howlita: blanca con vetas grises, representa la luz, la claridad, la revelación.
Obsidiana: piedra volcánica negra, refleja lo oculto, la profundidad, la sombra.
Ambas se convierten en trazos dentro de una colección que explora el dibujo como identidad y lenguaje. Estas joyas mexicanas contemporáneas no solo adornan, sino que expresan una visión del mundo.
Nuestros materiales no son meras herramientas; son la voz con la que hablamos. Al elegir cuidadosamente cada uno, construimos joyas que respiran, que cuentan, que trascienden. Descubre todas nuestras joyas, en su variedad, aquí.
Artículo publicado en:
Recuento de comentarios del artículo:
0
comentarios
La plata mexicana es reconocida internacionalmente gracias a su alta pureza, su diseño artesanal único y la huella histórica fascinante. Desde los talleres de Taxco hasta las minas líderes de producción de plata a nivel mundial, la tradición platera de México ha conquistado al mundo con su belleza y artesanía insuperable.
Alta pureza: plata esterlina .925 y más
La mayoría de la joyería de plata en México se fabrica con plata esterlina .925, compuesta por 92.5% de plata pura y 7.5% de cobre. Sin embargo, muchos artesanos mexicanos superan este estándar, trabajando con plata de .950, lo que brinda un brillo más intenso. Esta dedicación a la calidad ha convertido a la plata de México en símbolo de excelencia y lujo.
Organismos como el Consejo Regulador de la Plata en Taxco certifican la autenticidad del metal, reforzando la confianza de compradores nacionales e internacionales.
Historia de la plata en México
México ha sido uno de los principales productores de plata desde el siglo XVI. Regiones como Guanajuato, Zacatecas y Taxco fueron clave durante la colonia española, cuando la plata mexicana se convirtió en moneda de cambio global.
Hoy, México lidera la producción mundial de plata, con más de 6,000 toneladas extraídas anualmente. Esta riqueza natural ha permitido desarrollar generaciones de artesanos expertos que trabajan el metal con pasión y maestría.
Artesanía mexicana: tradición hecha joya
Más allá de la materia prima, lo que realmente distingue a la plata mexicana es su diseño artesanal. La tradición platera mezcla técnicas prehispánicas con influencias europeas, creando piezas únicas con gran valor cultural.
Taxco, conocido como “la cuna de la platería mexicana”, fue revitalizado en el siglo XX por el diseñador William Spratling, quien impulsó la joyería inspirada en el arte precolombino. Hoy, esta ciudad sigue siendo referente mundial en diseño de plata.
La plata mexicana es la mejor del mundo por su pureza, belleza y profunda conexión cultural. Cada joya es más que un accesorio: es un testimonio de historia, identidad y arte.
Si buscas joyas de plata mexicana, tanto modernas como tradicionales, puedes descubrir las de nuestra tienda.
Artículo publicado en:
Recuento de comentarios del artículo:
0
comentarios
Elegir una joya de buena calidad no es solo cuestión de estética, sino también de saber leer las señales que muestran su autenticidad y durabilidad. En este artículo te damos las claves para identificar una joya bien hecha y evitar caer en imitaciones o piezas de baja calidad.