En 2015 Martha se graduó, formando parte de la primera generación de egresados de la carrera de bellas artes en Taxco. Durante sus estudios eligió la asignatura técnica optativa de joyería porque le llamaba la atención poder conectar con el trabajo de su padre, lo que conocía desde su niñez, siendo a la vez un trabajo más minucioso. Desde ese momento se adentró en el mundo de la joyería, sobre todo cuando conoció a su maestro Miguel Ángel Ortíz. Miguel Ángel fue el que más oportunidades de aprendizaje dio a sus alumnos: venían a su taller a trabajar en su tiempo libre, refinando sus técnicas y aprendiendo unas nuevas. Lo que antes conseguía hacer durante un semestre en la universidad, en el taller de platería lo aprendió a hacer en una semana y eso la inspiró a seguir adelante con su carrera como joyera.

Actualmente Martha se define como artista, diseñadora y artesana de joyería. El camino no fue fácil, a pesar del apoyo que tuvo de su maestro y de su grupo Ars Faber, el colectivo centrado en investigación y preservación de técnicas de joyería, formada por 3 maestros y tres alumnos que surgió saliendo del diplomado.

El mundo de la joyería de Taxco no se lo puso muy fácil, aunque pronto sus joyas empezaron a ganar premios en concursos de joyería y orfebrería. El hecho de ser mujer le supuso un esfuerzo adicional para demostrar que no solamente diseñaba sus piezas, sino que las fabricaba. Otros joyeros, acostumbrados a que las mujeres de Taxco ayudaran a sus esposos joyeros con los procesos de creación, como por ejemplo el pulido de las piezas, o la venta, no creían que Martha fuera totalmente responsable de su trabajo.

Martha trabaja junto con su pareja y maestro Miguel Ángel Ortiz y sus dos perros Toribio y Hush. El taller en el que trabaja junto a Miguel Ángel tiene mucha historia: en su tiempo, trabajó ahí el padre de Miguel Ángel, joyero muy respetado que trabajó para Guillermo Spratling. Desde hace poco empezaron a dar formación a becarios que pueden tener gracias a un programa gubernamental Jóvenes Construyendo el Futuro.

Visitándolos en el taller, nos asombramos por la cantidad de ideas, proyectos e inspiración que se percibe desde cada rincón: los diseños frescos y diferentes de sus becarios, los bocetos de nuevas piezas, la materia prima (colecciones de piedras semipreciosas y piezas de ámbar).